Con el desarrollo de sensores, big data y realidad aumentada, los canales de atención cara a cara mejorarán significativamente la experiencia del cliente. Un asistente tendrá consejos rápidos en tiempo real sobre cómo hacer que la experiencia del cliente sea más placentera y libre de frustraciones. Imagine a un cliente que ingresa a una zapatería donde el vendedor ya conoce su estado de ánimo, qué estilos de zapatos, colores e interacciones prefiere el cliente en función de comportamientos, compras y experiencias de compra anteriores.