¿Es la tecnología capaz de responder a una de las preguntas más cruciales y misteriosas de la vida humana: cuándo y cómo moriré? Según la encuesta de Kaspersky , casi la mitad (48%) de los médicos creen que es posible. Los profesionales no descartan que las tecnologías médicas se vuelvan tan avanzadas que puedan predecir con precisión el año y la causa de la muerte en solo 20 años.
Este escenario no está lejos de la realidad. Cuantos más datos, incluida información sobre la salud y la esperanza de vida de diferentes personas, se recopilen en todo el mundo mediante diversos dispositivos y servicios, probablemente serán más precisas las predicciones de IA basadas en estos datos. Por supuesto, tales pronósticos no serán 100% precisos, ya que la esperanza de vida de una persona no solo depende de los indicadores que se pueden analizar.
¿Pero todos quieren saber cuándo y cómo terminarán sus vidas? Las consecuencias de tal revelación podrían ser impredecibles.
¿Conducirá a una depresión masiva, cuando las personas se den cuenta de la fugacidad de la vida, o, por el contrario, reconsideraremos nuestro enfoque de la vida y disfrutaremos cada momento de ella?
¿Las personas se volverán más conscientes de la salud para tratar de cambiar la predicción, o ‘harán todo lo posible’ sabiendo que tienen mucho tiempo?
¿Qué tan segura y privada será dicha información y cómo podemos asegurarnos de que no se usará para chantaje o especulación?