Las predicciones sobre el futuro tienden a sobreestimar la velocidad del desarrollo tecnológico a corto plazo. Dicho desarrollo nunca es un salto hacia adelante, sino un proceso suave, gradual y complejo que se desarrolla durante un período de tiempo relativamente largo.
En 2050, la humanidad verá tecnologías actuales mejoradas, no fundamentalmente nuevas. El proceso de introducción de tecnologías respetuosas con el medio ambiente será gradual. La medicina no logrará avances significativos, pero habrá un progreso incremental. Se prevé que la esperanza de vida media aumente en dos años. La implementación de tecnologías avanzadas ocurrirá más rápido en algunos países. Habrá un aumento significativo en la estratificación social y financiera. Las grandes ciudades crecerán y la densidad de población aumentará. Los países más avanzados tecnológica y económicamente se embarcarán en una nueva carrera espacial y nuevas misiones tripuladas a la Luna. Las tecnologías progresarán paso a paso. Para 2050, estos cambios habrán transformado la vida humana.

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